Alicia le devolvía la sonrisa al sol por la mañana y la luna le guiñaba un ojo antes de acostarse. Su pelo rubio trigo brillaba con los rayitos de sol que entraban por la ventana.
Esos eran días perfectos para ella y solía acompañarlos vistiéndose de colores bonitos.
Se levantaba a las 11: 11 minutos de la mañana y le gustaba tomarse un té de manzana bien calentito.
Con David pasaba momentos inolvidables, solían quedar para ver películas de acción, aunque a Alicia le gustaban más las de terror, así tenía la oportunidad de poder abrazarlo, muy muy fuerte y cerrar los ojos esperando uno de esos besos tan cálidos.
Todo cambió.
Su pelo dejó de brillar de la misma forma, ya no vestía colores bonitos, y aunque todo parecía igual de perfecto, en realidad ella no era más que una titiritera de un teatro irreal, desembocado al fracaso.
Solía apagar sus penas con un buen polvo y un cigarrillo minutos más tarde, aunque sabía que nada iba a cambiar por hacerlo y deseaba, de alguna manera, dejar de ser una simple compañera de una noche.
Pf,precioso..
ResponderEliminarSúu! la foto es increíble!
ResponderEliminary el texto una puta realidaaaad!
(LL.
te adoro gordaaa!
Merche...
Es genial, increíble.
ResponderEliminar;D